Los grandes desafíos de aquellos que trabajamos en cuidados paliativos, sean cuidados paliativos en oncología, o cuidados paliativos en general, es que hay una enorme carga clínica, que en general en nuestros países, recursos son muy limitados y eso disminuye la capacidad de poder hacer investigación.
Aquellos que trabajamos en ambientes, la carga clínica es muy grande. Tenemos que considerar que el laboratorio es el lugar donde practicamos clínicamente. Es decir, nosotros estamos enfocando algo único que es el paciente en lugar del cáncer, o del corazón o del hígado, y eso nos permite recolectar datos muy originales, muy únicos, que no requieren tanta tecnología, como por ejemplo un PET scan, un MRI, un molecular profile y todo eso.
Entonces, es importante primero considerar, que el laboratorio clínico es el lugar donde vemos los pacientes, sea la casa, el ambulatorio o las camas de internación, que el experimento es la evaluación y tratamiento que le damos a los pacientes, es decir, en la mayoría de la medicina por cáncer no se mide cuidadosa y diariamente el sufrimiento del paciente.
Nosotros si lo medimos. Eso es altamente publicable, y las intervenciones que hacemos diariamente en el tratamiento de los pacientes también son altamente publicables en la literatura, por ejemplo, bajamos el en esas que son como un poco uno de los instrumentos de medición de síntomas más comunes, como controlamos la constipación, como disminuimos el sufrimiento del paciente y la familia.
Todas esas intervenciones son altamente publicables y contribuyen al estado del conocimiento, así que yo creo que podemos hacer investigación en hospitales públicos de toda Latinoamérica, en clínicas de toda Latinoamérica y podemos presentar los datos en congresos como este, utilizando recursos limitados, y utilizando trabajo de voluntarios y de miembros del servicio para la recolección de datos y que hacemos cosas en esta región del mundo que otros no hacen en otras regiones del mundo.
Tenemos algunas terapias, tenemos algunas técnicas de comunicación, que son muy únicas de esta región y que la población mundial medica está ávida de conocerlo. Así que es importante trabajar con gente que puede mentorizarnos, que nos pueda ayudar a cómo escribir los primeros trabajos, pero que cada clínico trabajando en cuidados paliativos puede transformarse en un autor de trabajos de publicaciones que sean de gran ayuda a nuestra comunidad.