La mayoría de chicos de Estados Unidos no reciben la vacuna contra el VPH, que protege del cáncer, junto con las demás vacunaciones programadas, en gran medida porque los médicos no la recomiendan o explican sus beneficios de forma inadecuada a los padres, según un nuevo estudio del gobierno de EE. UU.
Los expertos advirtieron que sin la vacuna esos chicos podrían enfrentarse a la infección con el virus del papiloma humano (VPH), transmitido sexualmente, una importante causa de varios tipos de cáncer.
Lo más común es que los padres no vacunen a sus hijos varones contra el VPH porque el proveedor de atención sanitaria no lo recomienda, según los investigadores del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU.
Ese fue el motivo que adujeron el 24 por ciento de los padres cuyos hijos varones de 13 a 17 años de edad no habían recibido las vacunas, cuando se les preguntó como parte de una encuesta anual de la CDC sobre la inmunización de los adolescentes. El informe aparece en la edición en línea del 26 de octubre de la revista Pediatrics.
Los padres también citaron comúnmente una falta de comprensión sobre la vacuna, dijo la coautora del informe, Shannon Stokley, directora asociada de ciencias de la división de servicios de inmunización de los CDC.
Alrededor del 19 por ciento de los padres opinaban que la vacuna no era necesaria, el 16 por ciento dijeron que no sabían suficiente al respecto, y el 7 por ciento tenían preocupaciones sobre la seguridad, señala el informe.
"Tenemos que trabajar con los proveedores de atención sanitaria para que realicen recomendaciones firmes y comuniquen a sus pacientes que esta vacuna es necesaria", dijo Stokley.
Todas las excusas reportadas por los padres apuntan al médico como el punto débil de la cadena, dijo Debbie Saslow, directora de cáncer de mama y ginecológico de la Sociedad Americana Contra El Cáncer (American Cancer Society).
Se estima que cada año en Estados Unidos 26,000 nuevos cánceres son atribuibles al VPH, lo que incluye a unos 9,000 hombres, apuntaron los investigadores en el material de respaldo.
El VPH provoca casi todos los cánceres cervicales y anales. El virus también provoca alrededor del 70 por ciento de los cánceres de garganta, tres cuartas partes de los cánceres vaginales y el 63 por ciento de los cánceres del pene, según los CDC.
Actualmente, unos 79 millones de personas están infectadas con el VIH, y 14 millones de personas se infectan cada año.
La primera vacuna contra el VPH, autorizada en 2006, al principio solo se recomendó para las chicas, para protegerlas del cáncer cervical. En 2011, los CDC comentaron a recomendar la vacuna contra el VPH también para los chicos.
Las estadísticas muestran que casi el 42 por ciento de los chicos de 13 a 17 años habían recibido al menos una dosis de la vacuna contra el VPH en 2014, frente a casi un tercio en 2013.
Apenas el 21.6 por ciento de los chicos de esa edad habían recibido la serie completa de tres dosis de la vacuna contra el VPH en 2014, dijo Stokley. Esto es frente a menos de un 14 por ciento en 2013.
"Sabemos que puede subir más. Simplemente tenemos que trabajar más", aseguró.
Los investigadores encontraron que los chicos son más propensos a haber recibido la vacuna contra el VPH si son negros o hispanos, o si viven en un hogar solo con la madre o en una familia más pobre.
Esto podría ser un efecto de los programas federales que proveen gratuitamente las vacunas programadas a las familias con unos ingresos bajos, dijo Stokley. También podría ser causado por la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, que obliga a las aseguradoras a cubrir el costo completo de las vacunas.
Saslow dijo que algunos médicos podrían sentirse renuentes a recomendar la vacuna contra el VPH por temor a ofender a los padres.
"Los proveedores tienen la idea de que la vacuna contra el VPH es distinta de las demás", dijo Saslow. "Creen que a los padres les preocupa más, y les preocupa que los padres no vuelvan a traer a sus hijos si la recomiendan".
La vacuna está recomendada para los chicos y las chicas de 11 o 12 años, y algunos padres se horrorizan ante la idea de vacunar a sus hijos contra un virus de transmisión sexual a esa edad, comentó Saslow.
Desafortunadamente, sacar la vacuna del VPH de la programación regular de inmunizaciones reduce de forma drástica las probabilidades de que el niño reciba la serie completa, advirtió. También aumenta las probabilidades de que se vean expuestos al VPH antes de vacunarse.
La Sociedad Americana Contra El Cáncer y otros grupos ofrecen entrenamiento a los médicos para ayudarles a sentirse más cómodo al hablar sobre la vacuna contra el VPH, apuntó Saslow.
Los chicos deben recibir la vacuna no solo para prevenir la transmisión a las chicas, sino también para protegerse de las verrugas genitales y de los cánceres de garganta, pene y ano, señaló.
"Esta vacuna previene seis o siete tipos de cáncer, en chicos y chicas, hombres y mujeres", dijo Saslow. "Eso es importantísimo".
Fuente: Medline Plus