La Sociedad Americana Contra El Cáncer (American Cancer Society, ACS) ha retrasado la edad a la que se recomienda que una mujer debe comenzar a hacerse mamografías anuales, basándose en nuevas investigaciones que muestran que el riesgo promedio de cáncer de mama aumenta cerca de la menopausia.
La mayoría de las mujeres deben hacerse mamografías anuales entre los 45 y los 54 años de edad, y luego hacer una transición a una evaluación cada dos años siempre y cuando permanezcan sanas, según las nuevas directrices para la detección del cáncer de mama.
Las directrices son más conservadoras que el planteamiento anterior de la ACS, que recomendaba mamografías anuales a partir de los 40 y continuar mientras la mujer conservara su buena salud.
La sociedad oncológica cambió sus directrices, en parte, porque comenzó a observar el riesgo del cáncer de mama en incrementos de cinco años, en lugar de considerar a las mujeres de 40 a 49 en comparación con las mujeres de 50 a 59 o de 60 a 69, comentó el autor líder, el Dr. Kevin Oeffinger. Oeffinger es presidente del panel de directrices sobre el cáncer de mama de la ACS, y médico de familia del Centro Oncológico Conmemorativo Sloan Kettering, en la ciudad de Nueva York.
"Hallamos que las mujeres de 45 a 49 años son muy similares a las que tienen de 50 a 54 respecto a la presencia del cáncer, el riesgo de morir de cáncer y la reducción en la mortalidad a partir de la mamografía", señaló Oeffinger. "Eso nos ayudó a pensar. Opinamos que la evidencia es muy clara".
Las nuevas directrices aparecen en la edición del 20 de octubre de la revista Journal of the American Medical Association.
Con este anuncio, las nuevas directrices de la sociedad oncológica se acercan a las del Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de EE. UU. (USPSTF), el principal panel de expertos del país sobre medicina preventiva.
El USPSTF fue criticado en 2009 cuando recomendó que la mayoría de mujeres sanas sin un aumento en el riesgo de cáncer de mama esperaran hasta los 50 para comenzar con las mamografías, y que luego se sometieran al procedimiento cada dos años.
"En ciertas formas convergen más que antes, sobre todo porque la ACS se replegó un poco y recomendó una fecha un poco más tardía para las mamografías", dijo la Dra. Lydia Pace, especialista en salud de las mujeres del Hospital Brigham and Women's de Boston, coautora de un editorial acompañante en la revista sobre las nuevas directrices.
Por su parte, el USPSTF publicó una declaración anotando las similitudes entre su recomendación y las nuevas directrices de la sociedad oncológica.
"Planificamos examinar la evidencia que la ACS desarrolló y revisó mientras finalizamos nuestras propias recomendaciones [actualizadas] sobre la mamografía", apuntó el grupo de trabajo. "Las mujeres se merecen la mejor información y orientación sobre las mamografías para poder tomar las decisiones que más les convengan, junto con sus médicos".
En las nuevas directrices, la sociedad oncológica recomienda:
Que las mujeres de 40 a 44 años hablen con el médico sobre la mamografía, y tengan la opción de comenzar las pruebas anuales si lo desean o si sus factores de riesgo lo justifican.
Que las mujeres de 45 a 54 se hagan una mamografía anual.
Que las mujeres a partir de los 55 se hagan una mamografía cada dos años, y que solo las descontinúen cuando su esperanza de vida sea de menos de diez años.
La sociedad oncológica evitó decir en qué momento una mujer puede dejar de hacerse mamografías, aunque no hay evidencias sólidas sobre los beneficios o perjuicios de la mamografía después de los 74, dijo Oeffinger.
"Sabemos que las mujeres de nuestro país no solo viven unas vidas más largas, sino también sanas y activas", dijo. "No deseábamos poner un límite de edad. En realidad se trata de que las mujeres tengan probabilidades razonables de estar en buena salud durante más o menos diez años más".
La sociedad oncológica basó sus nuevas directrices en una revisión extensiva de las evidencias científicas actuales, lo que incluye nuevas evidencias a partir de numerosos estudios de gran tamaño, dijo Oeffinger.
Las directrices también se basan en los resultados de un nuevo estudio que revisó los casos de 15,440 pacientes de cáncer de mama entre los 40 y los 85 años de edad, que se publicó de forma simultánea en la revista JAMA Oncology.
Ese estudio, llevado a cabo por el Consorcio de Vigilancia del Cáncer de Mama (Breast Cancer Surveillance Consortium), encontró que las mamografías anuales eran mejores que las mamografías cada dos años para detectar el cáncer de mama tratable en las mujeres que se acercan a la menopausia.
"Nuestros hallazgos sugieren que el estatus menopáusico podría ser más importante que la edad cuando se consideran los intervalos de evaluación del cáncer de mama", concluyeron Diana Miglioretti, de la Facultad de Medicina Davis de la Universidad de California, y sus colaboradores. También anotaron que es algo "biológicamente plausible", porque el estrógeno, una hormona femenina, tiende a fomentar el crecimiento tumoral.
Sobre el estudio que aparece en la JAMA Oncology, Pace dijo que "en realidad intentan determinar lo que sabemos que es verdad, que aunque las mujeres más jóvenes tienen un riesgo absoluto más bajo de contraer cáncer de mama, parece que cuando [contraen cáncer] algunos de esos tumores son mucho más agresivos que los de las mujeres mayores".
Pero Pace no considera que el estudio de la JAMA Oncology ofrezca suficiente evidencia para respaldar la mamografía anual en las mujeres de 45 a 49 años.
"Creo que probablemente es un poco pronto para sacar la conclusión de que las mujeres de 45 a 54 años en realidad deban evaluarse con más frecuencia que las mayores", dijo. "No pudieron concluir que una evaluación menos frecuente conduzca a una mayor mortalidad por cáncer de mama".
Aunque la sociedad oncológica y el USPSTF se acerquen en sus recomendaciones, parece que las mamografías de las mujeres más jóvenes seguirán siendo un tema controversial.
El Colegio Americano de Radiología (American College of Radiology) y la Sociedad de Imágenes del Seno (Society of Breast Imaging) publicaron un comunicado conjunto en el que dicen que seguirán recomendando que las mujeres se hagan mamografías anuales a partir de los 40 años de edad.
"La detección temprana del cáncer de mama es esencial para mejorar la supervivencia a esa enfermedad, independientemente de los avances en los tratamientos", comentó la Dra. Debra Monticciolo, presidenta de la Comisión de Imágenes del Seno del Colegio Americano de Radiología. "Prescindir de la evaluación anual de las mujeres a partir de los 40 pone sus vidas en riesgo".
Más allá de la mamografía, las nuevas directrices de la sociedad oncológica concuerdan con las del USPSTF sobre otro tema importante relacionado con la evaluación del cáncer de mama.
Ambos grupos adoptan ahora una postura escéptica sobre los exámenes clínicos de los senos, en que un profesional sanitario entrenado observa y palpa los senos de una mujer en búsqueda de señales de cáncer.
La ACS desaconseja ahora los exámenes clínicos de los senos para la evaluación del cáncer de mama, independientemente de la edad. Antes, la sociedad oncológica había recomendado los exámenes clínicos de los senos más o menos cada tres años para las mujeres de 20 a 39 años, y anualmente a partir de los 40.
"Simplemente no pudimos encontrar evidencias que sugirieran que los exámenes clínicos del seno salvaban vidas", dijo Oeffinger. "Al final del día, una visita médica es como un escenario de suma cero. Hay una cantidad limitada de minutos. Creemos que en lugar de hacer algo que no podemos respaldar con evidencias, valdría mucho la pena pasar el mismo tiempo hablando con las mujeres sobre la mamografía".
Fuente: Medline Plus