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Agregar radiación podría ayudar a algunas pacientes con un cáncer de mama inicial

26 Jul 2015
Agregar radiación podría ayudar a algunas pacientes con un cáncer de mama inicial

Algunas mujeres que se someten a cirugía para un cáncer de mama en etapa temprana quizá se beneficien de la radiación adicional en los ganglios linfáticos cercanos, sugieren dos nuevos ensayos clínicos.

Los investigadores encontraron que la radiación adicional reduce el riesgo de recurrencia de cáncer de mama de las mujeres en la próxima década. Pero no alargó sus vidas.

Los estudios, ambos publicados en la edición del 23 de julio de la revista New England Journal of Medicine, buscaban responder a una importante pregunta sobre el tratamiento del cáncer de mama: Cuando se extirpan tumores en etapa temprana a las mujeres, y se encuentran células cancerosas en solo unos cuantos ganglios linfáticos cercanos, ¿se deben tratar esos ganglios con radiación?

Cuando no hay implicación de los ganglios linfáticos, la decisión es clara: sin radiación, comentó la Dra. Monica Morrow, cirujana de cáncer de mama del Centro Oncológico Conmemorativo Sloan Kettering, en la ciudad de Nueva York.

Por otro lado, cuando varios ganglios linfáticos resultan positivos en cuanto a la presencia de células cancerosas, la radiación tiene sentido, añadió.

El asunto se confunde cuando una mujer tiene de uno a tres ganglios afectados, dijo Morrow, coautora de un editorial publicado junto a los estudios.

Ya es estándar que las mujeres reciban radiación en el seno mismo tras la extirpación quirúrgica de los tumores, explicó el Dr. Timothy Whelan, investigador líder de uno de los estudios.

Además, las mujeres reciben quimioterapia, y con frecuencia fármacos hormonales.

"No ha estado claro si debíamos también irradiar los ganglios linfáticos", dijo Whelan, oncólogo del Centro Oncológico Juravinski de la Universidad de McMaster y Hamilton Health Sciences, en Ontario, Canadá.

En otras palabras, los beneficios de administrarla deben superar a los riesgos, y la radiación en los ganglios linfáticos puede tener efectos secundarios, como inflamación a corto plazo en los pulmones, e inflamación crónica en el pecho, los brazos y las manos (conocida como linfedema).

Pero según Whelan, los nuevos hallazgos sugieren que los beneficios podrían valer la pena.

En el estudio de su equipo participaron 1,832 pacientes de cáncer de mama que recibieron la terapia estándar para al cáncer de mama en etapa temprana, lo que incluye radiación en el pecho. La mitad se asignó al azar a también recibir radiación en los ganglios. La mayoría tenían entre uno y tres ganglios afectados.

Durante los diez años siguientes, el 82 por ciento de las mujeres que recibieron radiación en los ganglios permanecieron libres de recurrencia, en comparación con el 77 por ciento de las mujeres en el grupo de comparación.

Los efectos secundarios fueron relativamente poco frecuentes, dijo Whelan. Más o menos el 8 por ciento del grupo de radiación en los ganglios contrajeron linfedema, y poco más del 1 por ciento tuvieron inflamación pulmonar.

El efecto secundario más común, un sarpullido en la piel, afectó a la mitad de las mujeres.

La radiación en el pecho conlleva la posibilidad de complicaciones más graves, como daño cardiaco o un segundo cáncer. Pero al menos hasta ahora, esos problemas no han surgido en estas pacientes, señaló Whelan.

"La tecnología de computadora ha permitido que la radioterapia evolucione en los últimos 20 años", comentó. "Ahora es mucho más dirigida, para evitar el daño en el corazón y otros tejidos circundantes. Quizá por eso no estemos viendo algunos de esos efectos secundarios".

Sin embargo, Morrow apuntó que la precaución se hace necesaria.

"Para mí, estos estudios no justifican ofrecer radiación a todas las mujeres con uno a tres ganglios linfáticos afectados", planteó.

En general, la diferencia en la recurrencia del cáncer "obviamente no fue grande", dijo Morrow. "Y no se tradujo en una diferencia en la supervivencia general", añadió.

Tras 10 años, el 82 por ciento de las pacientes del estudio seguían con vida, independientemente de si habían recibido radiación en los ganglios o no.

El segundo estudio, de 4,000 mujeres europeas, mostró un patrón similar. Las que recibieron radiación en los ganglios tuvieron un riesgo de recurrencia algo más bajo en diez años: el 72 por ciento siguieron libres de cáncer de mama, frente al 69 por ciento en el grupo de comparación. Pero no hubo una ventaja clara en la supervivencia general.

Whelan dijo que sospecha que el seguimiento de su estudio no ha durado lo suficiente.

"Esperamos también ver una diferencia en la supervivencia con el tiempo", señaló.

Whelan añadió que, de cualquier forma, vivir el resto de la vida sin cáncer de mama "también es algo bueno".

Pero se mostró de acuerdo en que "esta terapia no es para todo el mundo".

¿Quién es una buena candidata? Whelan y Morrow dijeron que se necesita más investigación para averiguarlo.

Por ejemplo, comentaron, hay pruebas en el mercado que observan el perfil genético de un tumor de mama y juzgan las probabilidades de recurrencia. Podrían resultar útiles para elegir a las mujeres que se podrían beneficiar de radiación en los ganglios.

Por ahora, Morrow dijo que cree que la presencia de células cancerosas en uno a tres ganglios linfáticos no es suficiente para justificar la radiación adicional.

Sugirió que también se deben tomar en cuenta otros factores, como el tamaño y la agresividad del cáncer de la mujer.

En la vida real, los médicos ya ofrecen radiación en los ganglios a las mujeres como las del estudio.

Morrow sugirió que esas mujeres hagan ciertas preguntas. "Pregunte a su médico si usted es una buena candidata", aconsejó. "Pregunte sobre los beneficios esperados y sobre los efectos secundarios".

Fuente: Medline Plus