Después de la menopausia, los niveles malsanos de insulina podrían predecir el riesgo de cáncer de mama incluso mejor que el exceso de peso, según una investigación reciente.
Los nuevos hallazgos sugieren "que es la salud metabólica, y no el sobrepeso por sí mismo, lo que se asocia con el riesgo más alto de cáncer de mama en las mujeres posmenopáusicas", dijo el coautor del estudio, Marc Gunter, profesor asociado de epidemiología y prevención del cáncer en la Facultad de Salud Pública del Colegio Imperial de Londres, en Inglaterra.
Aunque a menudo las mujeres con sobrepeso u obesas tienen unos niveles altos de insulina, algunas mujeres con mucho peso tienen unos niveles normales de la hormona, afirman los expertos. Y algunas mujeres con un peso normal tienen niveles de insulina metabólicamente malsanos.
El estudio aparece en la edición del 15 de enero de la revista Cancer Research.
Para evaluar el papel de la insulina en el riesgo de cáncer de mama, Gunter estudió a más de 3,300 mujeres sin diabetes, 497 de las cuales contrajeron cáncer de mama en un plazo de 8 años. Analizó la información sobre su peso, los niveles de insulina en ayunas y la resistencia a la insulina, en la que el cuerpo no responde adecuadamente a la insulina. La insulina ayuda al cuerpo a usar los alimentos digeridos para obtener energía. La incapacidad de un cuerpo de producir insulina o de usarla adecuadamente lleva a la diabetes.
En el estudio, el sobrepeso se definió como el índice de masa corporal (IMC) de 25 o más. El IMC es un cálculo de la grasa corporal basado en la estatura y el peso.
"Las mujeres que tienen sobrepeso pero que no presentan anomalías metabólicas [como la producida por la resistencia a la insulina] no tienen un riesgo más alto de cáncer de mama que las mujeres [con un peso normal]", dijo Gunter.
"Por otra parte, las mujeres con un peso normal con anomalías metabólicas tienen aproximadamente el mismo riesgo alto de cáncer de mama que las mujeres con sobrepeso con anomalías metabólicas", añadió.
Gunter dijo que este vínculo aparentemente firme entre la insulina y el cáncer de mama no es una razón para que las mujeres ignoren el exceso de peso. Tener sobrepeso u obesidad aumenta las probabilidades de tener problemas con la insulina, dijo.
En este estudio, los niveles altos de insulina en ayunas duplicaron el riesgo de cáncer de mama, tanto para las mujeres con sobrepeso como para las que tenían un peso normal.
Además, las mujeres que tenían sobrepeso y resistencia a la insulina tenían un riesgo un 84 por ciento más alto de cáncer de mama que las mujeres con sobrepeso que no presentaban una resistencia a la insulina, halló.
Otras investigaciones han hallado que hasta el 10 por ciento de las mujeres con un peso saludable podrían tener problemas de insulina, dijo.
Gunter dijo que se necesita más investigación para explicar los hallazgos. La insulina puede provocar que las células, incluyendo las cancerosas, crezcan, de modo que eso podría ser un factor, indicó. Otras hormonas relacionadas con la insulina también pueden estar más elevadas en las mujeres con sobrepeso, y podrían contribuir al riesgo de cáncer de mama, dijo.
Los hallazgos generales no son sorprendentes, comentó la Dra. Courtney Vito, profesora clínica asociada de oncología quirúrgica en el Centro Oncológico City of Hope de Duarte, California.
"La grasa no está inactiva", apuntó. "Es un órgano activo metabólicamente y lo sabemos a partir de muchos otros estudios". Todavía hay muchas cosas que los expertos siguen sin saber de la grasa, señaló.
El estudio es interesante, dijo Vito, aunque se mostró de acuerdo en que se necesita más investigación antes de poder considerar los resultados como concluyentes. Vito no participó en el estudio.
La investigación previa de Gunter también halló que los niveles más altos de insulina fomentaban el riesgo de cáncer de mama en las mujeres posmenopáusicas. Lo que podría sorprender a algunos es la información sobre el riesgo mayor de cáncer de las mujeres delgadas con problemas de insulina, dijo la Dra. Allison DiPasquale, miembro del City of Hope y que no participó en el estudio.
Los estudios futuros, dijo DiPasquale, deberían observar más de cerca a cuatro subgrupos: las mujeres con sobrepeso con y sin problemas de insulina y las mujeres con un peso normal con y sin problemas de insulina.
Entre tanto, los tres expertos se mostraron de acuerdo en que la moraleja para las mujeres es comer una dieta sana y hacer ejercicio regularmente, de modo que el peso y los niveles de insulina tengan más probabilidades de permanecer normales.
Fuente: La Prensa - Honduras