Los hallazgos publicados en la revista Journal of Proteomics de la Asociación Europea de Proteómica (EuPA, por sus siglas en inglés) sugieren que los péptidos encontrados en la proteína del maíz tienen actividad anticancerígena y atacarían sólo a las células tumorales, por lo que podrían aplicarse en el desarrollo de nuevas opciones terapéuticas.
"Yo siempre he estado interesada en encontrar tratamientos contra el cáncer que no tengan todos los efectos adversos que tienen los productos químicos, y entre los beneficios que ofrece la proteína del maíz, es que comparados con las terapias convencionales contra el cáncer, los péptidos presentan varias ventajas: suelen ser selectivos hacia las células malignas, en su mayoría carecen de toxicidad y presentan pocos o nulos efectos secundarios”, destacó Margarita Ortiz Martínez, alumna del Doctorado en Biotecnología (DBT) del Tecnológico de Monterrey y una de las investigadoras.
Refirió que “existe abundante evidencia científica del potencial que tienen los granos enteros en el mantenimiento de la salud” por lo que el rastreo de péptidos en cereales es una forma de aprovechar su patrimonio genético y las particularidades de su proteoma (conjunto de proteínas que un organismo sintetiza a partir de los genes que contiene) para obtener un beneficio tangible en la salud humana.
Ortiz Martínez explicó que en los últimos años ha aumentado el interés en las proteínas y péptidos derivados de cereales, esto debido a que estudios recientes han demostrado que pueden influenciar de manera benéfica el funcionamiento del organismo por varios mecanismos, los más estudiados son la protección antioxidante y mejoras en la respuesta inmunitaria.
"En México, la mayor parte de la proteína proviene de los cereales y las leguminosas, por eso estamos haciendo estudios en proteómica para despegar esta área y para que se vislumbre su aplicación preventiva o correctiva", dijo por su parte el Dr. Silverio García Lara, profesor investigador de la Escuela Nacional de Posgrado en Ciencias, Ingeniería y Tecnología del Tecnológico de Monterrey.
De acuerdo con la Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional Mexicana de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el maíz, denominado cintli en náhuatl, ha sido considerado desde la antigüedad una planta divina relacionada con el origen de la vida. Los curanderos indígenas adivinaban el diagnóstico de las enfermedades con granos de maíz, que arrojaban al aire o sobre un lienzo blanco símbolo del plano horizontal del universo.
Entre sus aplicaciones medicinales refiere su uso para el tratamiento de padecimientos renales como "calor", inflamación y piedras en la vejiga, limpiar vías urinarias, orina retenida y riñón tapado. También se emplea, aunque con menor frecuencia, en padecimientos digestivos como dolor de estómago, estreñimiento, pujo y vómito. Otras propiedades que se le atribuyen son: como antiespasmódico, antihemorrágico, carminativo, digestivo y diurético.
Fuente: Hola Doctor