Extirpar todos los ganglios linfáticos cerca de un cáncer de piel melanoma quizá no aumente las probabilidades de supervivencia generales de un paciente, concluye un nuevo estudio.
El procedimiento invasivo, llamado disección radical de los ganglios linfáticos, es un tratamiento estándar, pero muy debatido, para el melanoma, el tipo más letal de cáncer de piel.
En el estudio, los investigadores siguieron a más de 1,900 pacientes de melanoma en todo el mundo. Encontraron que la extirpación completa de los ganglios linfáticos no era menor que una cirugía menos extensiva y la observación para alargar la supervivencia.
"Creo que muchos pacientes más optarán ahora por la observación, en lugar de la disección radical de los ganglios linfáticos de inmediato", comentó el autor del estudio, el Dr. Mark Faries.
Los hallazgos podrían ayudar a aclarar décadas de debates respecto a la mejor forma de utilizar las extirpaciones de los ganglios linfáticos, planteó Faries, codirector del programa de melanoma en la Clínica e Instituto de Investigación Ángeles, en Los Ángeles.
Un especialista en cáncer de Nueva York se mostró de acuerdo en que los resultados del estudio podrían cambiar la práctica estándar.
Los hallazgos constituyen un "cambio en el panorama" que ayudará a proteger a los pacientes de las consecuencias debilitantes de una cirugía innecesaria, afirmó el Dr. Daniel Coit, cirujano oncológico en el Centro Oncológico Conmemorativo Sloan Kettering, en la ciudad de Nueva York.
La cirugía más extensiva conlleva riesgos de complicaciones, incluyendo el linfedema postquirúrgico. Esto afecta significativamente a la calidad de vida del paciente, ya que su brazo o su pierna se inflama con fluidos después de que se perturbe a la vía linfática normal.
Este nuevo estudio define con claridad el rol adecuado de la cirugía, apuntó Coit. "Creo que es una declaración definitiva y absoluta sobre el tema", añadió.
Todos los participantes del estudio fueron diagnosticados inicialmente con cáncer en un ganglio linfático centinela, que se considera como el canario en la mina de carbón respecto al inicio del cáncer.
(Los ganglios linfáticos son parte del sistema linfático del cuerpo, un componente clave del sistema inmunitario).
Más o menos la mitad se sometieron a una cirugía extensiva de los ganglios linfáticos para extirpar el ganglio centinela y los ganglios linfáticos cercanos.
Pero los demás pacientes solo se sometieron a la extirpación mínimamente invasiva del ganglio centinela, en que se deja a los ganglios circundantes en su lugar para su observación posterior.
El equipo de investigación encontró que extirpar todos los ganglios linfáticos sí ayudó a los médicos a obtener más detalles sobre los prospectos a largo plazo del paciente. Hacerlo también pareció alargar el periodo que los pacientes siguieron libres de la enfermedad.
Pero al final "el estudio mostró que la cirugía adicional no mejoró las probabilidades de un paciente de vivir más tiempo", dijo Faries.
Los resultados aparecen en la edición del 8 de junio de la revista New England Journal of Medicine.
Las tasas de melanoma han estado en aumento durante 30 años. Según la Sociedad Americana Contra El Cáncer (American Cancer Society), este año se diagnosticarán más de 87,000 melanomas nuevos en Estados Unidos, y casi 10,000 estadounidenses morirán por su causa.
Faries anotó que la extirpación electiva de los ganglios linfáticos se propugnó por primera vez como opción de tratamiento a finales del siglo XIX.
El motivo, dijo, es que más o menos un 20 por ciento de los pacientes de "melanoma de riesgo intermedio" tienen un cáncer en los ganglios linfáticos que no se detecta a menos que se extirpen y examinen.
Pero en los 80, los investigadores identificaron el ganglio centinela característico, permitiendo que se realice una biopsia menos invasiva. Y muchos médicos comenzaron a evitar la extirpación radical de los ganglios linfáticos en los casos en que se encontró que el ganglio centinela no tenía cáncer.
"Si el ganglio centinela está limpio, los otros ganglios en esa área también deberían estar limpios", explicó Faries.
Pero en los casos en que un ganglio centinela es canceroso, la cirugía de extirpación radical de los ganglios linfáticos sigue siendo el estándar, a pesar del debate sobre si ofrece un beneficio significativo.
Para explorar el tema, los investigadores siguieron a pacientes de melanoma de 60 centros médicos entre 2004 y 2014.
Entre aquellos cuyos ganglios linfáticos fueron extirpados, casi una cuarta parte desarrollaron linfedema.
Pero entre aquellos a quienes solo se extirpó el ganglio centinela, solo un 6 por ciento desarrollaron la inflamación, mientras que las tasas de supervivencia siguieron siendo comparables.
Coit, autor de un editorial que acompañó al estudio, dijo que es razonable decir que un 30 por ciento de los pacientes que se someten a la extirpación radical están en riesgo de linfedema. Esto llega a entre un 50 y un 60 por ciento de los pacientes de más edad y con sobrepeso, añadió.
"El cáncer de mama es un cáncer muy distinto, pero ya han establecido más o menos lo mismo respecto a esa enfermedad", señaló Coit. "Y este hallazgo es completamente coherente con los resultados de un ensayo más pequeño que se publicó antes".
Fuente: Medline Plus